Matanza de civiles en Sarajevo por proyectiles...
Simeón Sáiz Ruiz
1999
Oleo sobre lienzo
Medidas: 206,5x334 cm
A.C.A.C. Bodegas Vega Sicilia, S.A.
Procedencia:
Col. artista / Gal. Fúcares, Madrid / C.A.C.- Museo Patio Herreriano, Valladolid
Firma:
SIN FIRMAR
Exposiciones:
2000 Canal de Seducción, Monasterio de Nuestra Señora del Prado, Valladolid
BibiliografÃa:
Jiménez, J., "Simeón Sáiz Ruiz. Reaccionar ante la imagen", El Mundo. Cultura, 17 de junio, 2000, 68 rep. b/n; Museo Patio Herreriano. Arte Contemporáneo Español, Colección Arte Contemporáneo y Ayuntamiento, Valladolid, 2002, 260, rep.c.
Comentario:
Realizado al óleo sobre lienzo, este cuadro de Simeón Sáiz Ruiz se sitúa en el lugar y en el lenguaje tradicional de la pintura para proponer una reflexión sobre la imagen, su contenido y su incidencia en el espectador. La escena representa algunos hombres que acuden en socorro de personas caÃdas en medio de charcos de sangre. No parece que haya mucho que hacer: están muertos. La imagen no es nÃtida, sino elaborada a base de pequeños puntos de color que simulan fotografÃas digitalizadas, transmitidas por equipos electrónicos. Se trata de uno de los cuadros de la serie titulada J'est un Je (Yo es yo), iniciada en 1996 y titulada a partir de una frase del poeta Arthur Rimbaud: J'est un Autre (Yo es otro). El pintor toma como punto de partida fotos de prensa y televisión que fueron divulgadas durante la guerra de Bosnia. Son solo fotografÃas de las vÃctimas, no de los combates ni de los "protagonistas" polÃticos del conflicto. Quince cuadros representan aquéllas ampliadas y traducidas a pintura, acompañadas de tÃtulos explÃcitos que reproducen los pies de foto y titulares originales, proporcionando datos concretos, dÃa y hora del hecho evocado. No se trata de una serie periodÃstica ni tampoco narrativa. El punto de vista del reportero gráfico es sustituido por la reflexión sobre la labor del arte y su posibilidad de desvelar acontecimientos e inducir al espectador a cuestionar la realidad. Las fotos de prensa son, en principio, captación de lo real, sin embargo, los intereses propagandÃsticos y polÃticos, asà como la manipulación técnica de las imágenes, hacen que la veracidad de los documentos gráficos pueda ser puesta en tela de juicio, de manera que Sáiz quiere advertir también sobre la utilización tendenciosa de las imágenes de guerra por motivos polÃticos y mediáticos. Por otra parte, el tÃtulo mismo trata de orientar la atención sobre los excesos del "yo" como posición absoluta degenerada en fanatismos, nacionalismos radicales y totalitarismos. Sáiz reclama la participación del "otro" y la diferencia, huyendo de cualquier imposición de una verdad absoluta: atender al otro, ser uno mismo gracias al otro. Por ello concede especial importancia a varios puntos de vista posibles del espectador en esta serie, que concibe como posiciones más que como cuadros. Las primeras se presentan desde una visión muy lateral casi pegada a la imagen, lo cual produce deformaciones propias de una perspectiva muy rasante que hace irreconocible el episodio. Las demás van acercándose a la perpendicular en virtud de la cual se reduce la deformación y se recuperan las formas. Matanza de civiles en Sarajevo por proyectiles... es una de las posiciones laterales más próximas a la central, y por ello el cuadro resulta reconocible aunque no hasta el punto de permitir una identificación de los rasgos concretos de las vÃctimas. El espectador es quien completa la obra. CB