Femme au petit cube
Julio González
1937
Lápiz, tinta china y ceras sobre papel
Medidas: 21,6x16,8 cm
A.C.A.C. Ebro Foods, S.A.
Procedencia:
Col. arista / Sucesión González, París / Gal. De France, París / Gal. Elvira González. Madrid / C.A.C.-Museo Patio Herreriano, Valladolid
Firma:
SIN FIRMAR
Exposiciones:
1931 Julio González, Gal. de France, París / 1995-96 Julio González: Esculturas y dibujos, 1904-1942, Gal. Elvira González, Madrid / 1996 Julio González: Esculturas y dibujos, 1904-1942,Gal. Faggionato Fine Arts, Londres
Bibiliografía:
Anónimo, “Julio González: “esculturas y dibujos, 1904-1942”, El Punto de las Artes, 1 a 7 diciembre, 1995, 4, rep. b/n; Bernárdez Sanchís, C., "Consideraciones sobre el Dibujo en el arte español del siglo XX", en El arte español del siglo XX. Su perspectiva al final del milenio, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2001, 430, rep. c; Gibert, J., Julio González. Dessins. Projets pour sculptures. Personnages, París, Editions Carmen Martinez, 1975, 58, rep. b/n; Museo Patio Herreriano. Arte Contemporáneo Español, Colección Arte Contemporáneo y Ayuntamiento, Valladolid, 2002, 330, rep.c.
Comentario:
Catalogada por Josette Guibert dentro de los dibujos de "Personajes", esta Femme au petit cube no corresponde específicamente a ninguna escultura. Ocupa en altura la totalidad de la hoja de papel y su técnica sigue, como en Les acrobates IV, la tan frecuente superposición de lápiz, tinta y ceras coloreadas. Sin embargo, estructuralmente la figura cambia con respecto a la linealidad de la obra anteriormente comentada, porque Femme au petit cube está concebida con una volumetría mayor, articulándose como bloques geométricos yuxtapuestos que en su realización escultórica corresponderían a los constituidos por chapas de hierro soldadas que González empezó a utilizar en 1934, por ejemplo en Femme assise I y II o en Femme se coiffant III, de 1936. Este tipo de concepción recupera planteamientos de la escultura cubista, y la presencia del pequeño cubo que da nombre al dibujo no es ajena a esta herencia. Hay además una mención clara a las máscaras que Julio González incorpora aquí en la cabeza de la figura: una máscara ovalada de tajantes perfiles que recuerda a las que él mismo hiciera en hierro cortado y forjado desde principios de la década y que aquí, con su giro lateral y su cabellera de líneas abiertas en abanico, es el único elemento que rompe la presencia nítida y estática del eje vertical de la figura. Hay un elemento monumental en esta pieza, marcada por el contraste macizo de los bloques geométricos del cuerpo y el gran hueco central que permite concentrar la atención sobre las grandes manos asimétricas y desiguales que González empleará con frecuencia en obras sucesivas. Este tipo de mano de carácter abstracto, y otra mano naturalista, también abierta y con los dedos extendidos, serán elementos expresivos cuya presencia será frecuente en la obra de los últimos años de vida del escultor. Existe relación entre esta figura y los dibujos que preparan la configuración de los "hombres cactus". CB