Estudio para remates de escultura

Alberto Sánchez

Lápiz sobre papel
Medidas: 37,5x28,5 cm
A.C.A.C. Colección BBVA

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Procedencia:
Col. artista / Familia del artista / C.A.C.- Museo Patio Herreriano, Valladolid

Firma:
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Exposiciones:
1997, Alberto Sánchez 1895 - 1962. Dibujos, Bilbao, Museo de Bellas Artes/ 2001, Alberto 1895-1962, M.N.C.A.R.S., Madrid (nº cat. 169)

Bibiliografía:
Brihuega, J., Alberto Sánchez 1895 - 1962. Dibujos, Bilbao, Museo de Bellas Artes, 1997, rep. c; Alberto 1895-1962, (cat.) Madrid, M.N.C.A.R.S., 2001, 361, rep. c; Museo Patio Herreriano. Arte Contemporáneo Español, Colección Arte Contemporáneo y Ayuntamiento, Valladolid, 2002, 65, rep. c

Comentario:
Alberto Sánchez realizó gran cantidad de dibujos a lo largo de su vida, orientados a la creación de esculturas, de escenografías y figurines, y también como obras autónomas que no fueron traducidas a otros medios. El dibujo era para él un fértil campo de exploración de las formas, además de un registro de sus memorias. Estudio para remates de esculturas es un dibujo preparatorio en el que el artista explora diversas posibilidades para remates de piezas escultóricas. Por ello, se centra exclusivamente en el trazado de varias posibilidades, sin detenerse a completar los cuerpos salvo en una ocasión, en la figura del borde inferior, que apunta un cuerpo de mujer más definido con cabeza cúbica de cuatro cuernos. Realizados a lápiz, estos estudios parciales están muy acabados, definiendo formas y volúmenes mediante un cuidadoso sombreado que les confiere un carácter escultórico. El dibujo fue realizado en los últimos años de su vida en la antigua Unión Soviética, donde se había exiliado en 1938. Tras un largo periodo de nula producción escultórica, en 1953 empezó a hacer escultura de nuevo, de pequeño tamaño y en materiales muy humildes, realizando a partir de 1956 algunas de sus más importantes creaciones. C.A.C.-Museo Patio Herreriano posee dos de ellas: Monumento a la Paz y Cazador de raíces. Recuperó Alberto la antigua poética surreal y estilizada de sus creaciones toledanas y vallecanas anteriores a la guerra civil y en Rusia volvió a crear campesinas castellanas, toros ibéricos y figuras en paisajes recordados. En su producción escultórica, fuertemente influida por su sentido biomórfico y por la mezcla de formas humanas y animales o minerales, Alberto Sánchez había expresado el espíritu de la relación con la tierra y sus criaturas. Esas figuras híbridas eran portadoras de un sentido integrador de las fuerzas de la naturaleza en su pulsión creativa. Ciertos elementos se hicieron característicos, como la figura femenina, los pájaros y el toro. En sus esculturas y dibujos desde los años treinta, Alberto había dedicado gran atención a los remates como elementos significativos, no solo decorativos, que potenciaban el impulso vertical de sus esculturas. Desarrolló una amplia variedad: la media luna de evocación mironiana, estrellas, cuernos de toro, capuchas, alas o cuerpos de pájaro (la perdiz, especialmente). Estudio para remates de esculturas reproduce variantes de cuernos, evocando la cabeza del toro como expresión de energía telúrica y símbolo español por antonomasia, y también cabezas de pájaro muy estilizadas. Este tipo de remates, aunque no idénticos, pueden verse en la escultura citada de esta misma colección: Monumento a la Paz. CB