MARINA NÚÑEZ
El infierno son nosotros
El título “El infierno son nosotros” surge a partir de la afirmación de Sartre, L’enfer, c’est l´Autre el infierno son los otros), escrita en su obra A puerta cerrada (Huis Clos, 1943). Para el filósofo el infierno está en la mirada del otro, de los otros, y de forma significativa en la forma en que ésta nos condiciona, pues siempre implica un juicio que nos vincula modificando nuestra propia conducta. Estos temores el miedo a la otredad, a lo que no nos es propio, han estado muy presentes en la obra de Marina Núñez.
La capilla funeraria, con sus arcosolios destinados a cobijar los enterramientos de sus patronos, es un espacio concebido para pasar la eternidad. En la obra de Marina se materializa el gran temor de sus constructores, ese infierno del que la capilla debe mantenerles protegidos. Figuras antropomórficas tratan de huir de las llamas reptando de forma endiablada por los muros. Pero las llamas participan de su misma naturaleza, las llamas somos nos-otros. El que huye lo hace de sí mismo, de sus semejantes, del infierno implícito en las relaciones humanas cuando estas están viciadas, del desconocimiento del propio yo y del abismo consecuente.
Para llamarnos la atención sobre estas reflexiones, cercanas a las del filósofo existencialista francés, Marina Núñez recurre en esta ocasión a una videoinstalación múltiple. Siete video-proyecciones evolucionan sobre las paredes de la Capilla del Patio Herreriano arrojando sobre sus sillares siluetas incandescentes de personas que se arrastran o son arrastradas por los muros. Las figuras, remiten iconográficamente a las poseídas por espíritus que las violentan, a las histéricas con sus retorcimientos y convulsiones, a los monstruos en los que las metamorfosis se suceden. Forman por tanto parte reconocible del universo de Marina. Como en el mismo entorno, una ruina reconstruida, se suceden procesos de caída y regeneración, en un movimiento fluido pero convulso, doloroso pero extático. Una vez más la capilla provoca al espectador invitándole a la reflexión desde los terrenos del arte.