Juan F. Lacomba
1954 Sevilla (España)
Biografía:
Pintor autodidacta, obtiene la licenciatura en Historia del Arte en 1977, año en que regresa a la práctica de la pintura después de un intervalo de tres años en los que realiza otras actividades vinculadas con el Patrimonio y los museos. Influenciado por las corrientes de Support-Surface, su primera individual tiene lugar en la galería Imagen Múltiple de Sevilla en 1981. Ese mismo año se traslada a Madrid como resultado de la concesión de una beca por parte de la Casa de Velázquez. Emprende un paulatino viraje hacia la figuración, con un progresivo interés hacia el paisaje andaluz, en el que se aprecia su estudio por la pintura francesa, aunque la inserción de palabras en el lienzo alusivas a la tierra señala su interés por otras plásticas, como la de Jasper Johns. En 1983 obtiene una beca del Ministerio de Cultura. Dos años más tarde se traslada a París, becado por el gobierno francés, donde coincide con otros pintores españoles como Barceló o Sicilia. Allí profundiza en la pintura francesa y en el paisajismo, que diversifica con la introducción de escenas urbanas parisinas. Ese año recibe el primer premio del certamen de pintura de la Fundación Luis Cernuda de Sevilla. De regreso a España se instala en Carmona, donde desarrolla su trabajo en solitario, alejado de los circuitos del mercado artístico. Ruinas clásicas, arquitecturas, puentes, molinos o Ríotinto aparecen como motivos de su pintura, paisajes inquietantes de colores muy matizados y bañados de una luz espectral en los que desaparece la figura humana, y en los que aparece interesado por plasmar el silencio, el tiempo, la erosión, lo que es permanente o el debate con la naturaleza. No exenta de simbolismo y una poderosa carga metafórica, su pintura toma prestados elementos formales de géneros como el bodegón. Marruecos o Turquía aparecen como protagonistas de series en el tránsito hacia los años noventa, a través de paisajes que vuelven a hablar de las metáforas que encierra la naturaleza. En 1990 presenta en la galería Rafael Ortiz de Sevilla Fuegos, óleos que mantienen un diálogo ambiguo entre el mito y la cotidianidad del fuego. La figura humana aparece como vehículo de connotaciones autobiográficas en su obra de mediados de los noventa, en la que adopta nuevos formatos –dípticos y polípticos- e intensifica su acercamiento a los lenguajes abstractos. En 1996 obtiene el primer premio de la Fundación Focus de Sevilla. En los últimos años colabora con la Universidad de Sevilla y otras instituciones andaluces como gestor cultural, director de varios talleres de creación artística y poética y comisario de diversas exposiciones. CB VT & AGV